Crítica de SensaCine.com.mx para Jurassic World: El reino caído: El terror de los dinosaurios

25 años han pasado desde que Steven Spielberg nos sorprendió con lo hecho en Jurassic Park, aquella cinta en la que vimos cómo los dinosaurios cobraban vida gracias a los avances en el campo de la clonación. Tras su éxito mayúsculo llegaron nuevas entregas y este año podemos disfrutar de la quinta: Jurassic World: El reino caído, en la que Owen (Chris Pratt) y Claire (Bryce Dallas Howard) regresan para volverse a involucrar con los enormes reptiles, al parecer no aprender la lección de mantenerse alejados por su seguridad.

La isla Nublar está en riesgo de desaparecer y con ella también los dinosaurios que viven ahí después de que el parque quedara destruido. La actividad del volcán que se encuentra en aquel lugar amenaza con terminar con todo a su paso y volver a extinguir a los milenarios reptiles, por ello los protagonistas tienen que buscar la forma de rescatarlos, pero en el intento se encontrarán con secretos que amenazan su seguridad y la de los dinosaurios.

Una historia arriesgada, ya que esta vez no hay tantas escenas tradicionales de la franquicia, en las que los dinosaurios se salen de control y toda la gente corre asustada. Ahora decidieron darle más peso a una trama de corte social, en la que se tienen que tomar decisiones respecto al futuro de los reptiles. Hay un lapso relativamente extenso en el que todo esto toma lugar y hace que las emociones decaigan. Esperaba ver más dinosaurios sueltos por ahí, pero me encontré con mayor contención.

Aplaudo la decisión de dejar las islas para desarrollar la mayor parte de la trama, ya era muy repetitivo que prácticamente todo se desarrollara en el territorio de los dinosaurios, y justo hay una escena de este cambio de locación que te rompe el corazón. No puedo dejar de mencionar la composición de los reptiles que cada vez son más reales, me sigue sorprendiendo el trabajo que hay detrás de estas creaciones.

Jurassic World: El reino caído trata de darle un giro a su moneda y tal vez no haya sido la mejor decisión. Hay momentos de terror y suspenso que son bastante agradables, pero prescindir demasiado de la marca de la casa, es algo con lo que no muchos estarán de acuerdo.