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    Doctor Sueño
    Críticas
    4,0
    Muy buena
    Doctor Sueño

    Una incesante historia entre sueños y demonios

    por Uriel Linares

    Un largo pasillo tapizado de colores carmesí y extrañas figuras hexagonales son recorridas por un pequeño y su triciclo, sin saberlo, va hacia un sitio habitado por seres malignos que buscan alimentarse de su inocente alma. Es totalmente imposible no tener helada la sangre al recordar este momento. El icónico Danny Torrance está de regreso en la pantalla grande con Doctor sueño, historia que da continuidad a los famosos hechos del clásico de horror, El resplandor, de Stanley Kubrick (Naranja mecánica).

    Pasaron 36 años para que el rey del terror, Stephen King, decidiera publicar esta secuela literaria que no sólo muestra a Danny Torrance en su etapa adulta, sino también presenta un culto de seres demoniacos, quienes se alimentan de niños con los mismos poderes que posee Danny. Y para fortuna de todos los fanáticos, Mike Flanagan (La maldición de Hill House) decidió adaptar esta historia y llevarla a la pantalla grande. Por su puesto el reto es mayor y la expectativa se incrementa con cada paso hacia el estreno, ¿habrá conseguido ser más espeluznante que su icónica predecesora?

    El ritmo y la elegancia con la que es llevada esta cinta son perceptibles desde los primeros instantes, los cuales se encargan de adentrar al público en la vida de Danny Torrance (Ewan McGregor), al mostrarle en decadencia absoluta. Su pasado le ha seguido atormentando y nunca ha podido superar el horror del Hotel Overlook. De este modo el guion de Flanagan inspirado directamente en el libro de King no lleva prisa alguna por mostrar el lado más siniestro de la historia. 

    Esto recae en los hombros del talentoso Ewan McGregor, quien tiene la capacidad de presentar a un frágil e inestable Danny; con gestos que denotan su cansancio por la vida y sosegadas posturas es como el actor escocés de 48 años mantiene esta incansable historia de terror, uno que va incrementándose con los minutos y no te dejará descansar ni un solo instante. 

    Y esto no sólo se trata de la adaptación de un best seller escrito por el amo del terror ni de tener al destacado McGregor entre su reparto. Esta es una cinta compleja desde su elaboración, cada elemento forma parte de una atmósfera mayor construida principalmente por dos elementos: visual y sonoro. A lo largo de la cinta las composiciones orquestales con pesadas melodías exponen los sentidos del espectador y con sólo escuchar el cambio de rimo en algunos momentos sabrás perfectamente que algo está por llegar, es como si la película misma te otorgara un sexto sentido, pero uno ligado con demonios que cazan niños.

    La fotografía también logra disfrazarse por completo y se vuelve imperceptible. Este es el caso y no sólo eso, los lentos movimientos de cámara que crean por sí mismos el latente suspenso me recordaron otros clásicos como El bebé de Rosemary, Hasta el viento tiene miedo y, por supuesto, El resplandor. Puede notarse esta influencia visual que va en perfecta sincronía con el sutil desarrollo de la cinta para conseguir un resultado inmersivo.

    Es verdad, la película dura 2 horas con 31 minutos, probablemente sea un elemento a considerar ya que no todas las producciones con tanta duración logran salir avante, un claro ejemplo es la reciente IT: Capítulo 2, la cual fue incapaz de cubrir su duración con una narrativa funcional, esto pudo traducirse sencillamente en pesadez y aburrimiento. Sin embargo, esto no fue el caso, Doctor sueño podrá tomarse como referente al momento de hablar de películas largas y que mantengan un libreto dinámico capaz de nunca soltar la atención del espectador.

    Y es justamente en este momento en el que Rebecca Ferguson y la pequeña Kyliegh Curran hacen acto de presencia, cada una de ellas representa un contrapeso distinto en la historia. El notable carisma que siempre ha rodeado a Ferguson funge como el anzuelo perfecto para presentar a un poderoso ser demoniaco capaz de cargar por momento la cinta entera. Por otro lado, Curran tiene la valía de crear una especial conexión con Ewan McGregor y en todo momento dejar claro con su presencia que ella tiene a un personaje distinto y crucial para la trama, su rostro confiado y fluidos diálogos remarcan su valiente personalidad. De este modo esta tercia de actores llevan al espectador a un sube y baja de escalofriantes emociones.

    Doctor sueño es una cinta que también se da tiempo de poner sobre la mesa una latente reflexión de vida y pertenencia para el ser humano: el aprecio por cada uno de tus días y el camino a través de la muerte. Por supuesto gracias a la obra literaria de Stephen King, quien vuelve a dar muestra de su talento para crear historias únicas que tienen como segundo hogar el séptimo arte. Es así como Danny Torrance vuelve a la pantalla grande, con una incesante historia entre sueños y demonios.

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