Mi cuenta
    Sin origen
    Críticas
    1,0
    Muy mala
    Sin origen

    Narcos y vampiros, una historia para el olvido

    por Uriel Linares

    ¿En qué se basa el éxito de una película? Quizá una de las preguntas más complejas y sin respuesta precisa, podría ser el guion, la dirección, el trabajo de los protagonistas o aspectos técnicos como la dirección de fotografía e incluso el diseño de arte, tal vez sea cuestión de un todo. Ahora mismo ha llegado Sin origen, la nueva cinta de Rigoberto Castañeda (Kilómetro 31) que de acuerdo al director es una cinta distinta y su valor recae en ello, ¿este argumento soporta el resultado final de la película?

    Pedro de Toro (Daniel Martínez) se hizo de una gran fortuna trabajando para el crimen organizado en México hasta que un día decidió abandonar esta vida y dejar el cártel al que sirvió por años, por supuesto espera graves consecuencias (nadie puede salir sin pagar). Esto le llevó a construir una lujosa casa alejada de la ciudad con un avanzado sistema de protección y de este modo salvar la vida de su familia ante cualquier amenaza externa.

    Una noche llega lo temido: unos misteriosos sujetos ponen en riesgo su seguridad y asesinan a gran parte de sus empleados, ahora Pedro sólo cuenta con su gran amigo Alan (Horacio García Rojas) para salir de este problema, sin embargo, estos misteriosos personajes utilizan espadas medievales, muestran asombrosas habilidades físicas y tecnología desconocida; su objetivo es una pequeña niña que fue rescatada por Pedro unas horas antes ya que en realidad es una poderosa vampira.

    Es innegable que la industria cinematográfica en nuestro país (al igual que la del resto del mundo) da prioridad a producciones económicamente rentables, capaces de generar ingresos en taquilla; esto ha consolidado a historias de comedia romántica, acción y superhéroes como las favoritas del público, es por ello que Rigoberto Castañeda desde el Festival Internacional de Cine Guanajuato aseguró que Sin origen es una cinta distinta y atrevida, capaz de romper el orden dictado por grandes blockbusters apostando por una historia de vampiros, narcos y fuerzas misteriosas.

    Una cosa es buscar romper el molde con sólidos planteamientos en la historia, actuaciones capaces de crear un vínculo con el espectador y una dirección que pueda encauzar las refrescantes ideas y una muy distinta se aprecia en Sin origen, donde Castañeda dio muestra de una desordenada y descuidada historia que jamás tuvo rumbo alguno; el problema no está en mezclar personajes fantasiosos con situaciones reales como los cárteles de drogas, el problema está en volver inverosímiles sus planteamientos y con ende el ritmo de su historia.

    La cinta jamás logra encontrar su identidad y en cuestión de unos pocos minutos un sinfín de ideas (sin conexión alguna) se vuelven el camino principal de la cinta que también cuenta con las actuaciones de Paulina Gil, Lisette Morelos y Arap Bethke. Es así como de un instante a otro me encontré atrapado entre El exorcistaBlade: Cazador de vampiros e incluso cierta personalidad de Bruce Wayne (Batman) en su protagonista termina por volver aún más confuso el camino.

    Una vez que reunes estos elementos es evidente que la cinta obliga al espectador a rendirse por completo, dejar de buscar sentido a lo presentado en la pantalla grande y no preocuparse más por descubrir a sus personajes. Esto bajo un manto de situaciones predecibles que entre diálogos simples estancan la narrativa de la historia, la cual desmiente los argumentos de su director al no ser innovadora ni merecedora de aplausos por su arriesgada apuesta entre vampiros y narcos; es verdad que se aleja del orden establecido en nuestro país, pero esto no basta.

    Comentarios

    Back to Top