En el club nocturno Kiss ubicado en la localidad de Santa María, en Rio Grande do Sul aconteció una de las peores tragedias, pues en la madrugada del 27 de enero del 2013 se incendió este lugar que tuvo como resultado la muerte de 242 jóvenes y varios heridos. Todos los asistentes iban ahí para tener un momento de diversión, una gran noche que recordar al lado de sus amigos, pero todo se salió de control a causa de un chispazo que no pudo ser controlado y debido a que el lugar no contaba con ciertas medidas de seguridad, los jóvenes murieron asfixiados o por quemaduras. A lo largo de la serie se muestra cómo los padres de las víctimas deciden llegar hasta las últimas consecuencias para obtener la justicia que merecen sus hijos y sean de alguna forma reparados por un gran daño y pérdida que les dejaron para toda la vida. Debido a que la discoteca en realidad estaba llena de irregularidades que fueron ignoradas por el Ayuntamiento, todos se unirán para que cada involucrado en el caso pague y así los jóvenes puedan descansar en paz.