Para sofocar la amenaza a su propio papel en el comercio local de drogas, Vic le declara la Guerra al plan de Navarro y Armando Quintero de unir a dos bandas violentas y monopolizar el tráfico de cocaína en Farmington. Es una guerra que favorece las muertes por sobre los prisioneros y que envía al Equipo de Asalto más allá de la frontera sur antes de exponerlos a una operación de lavado de dinero.