Salvatore Mineo Jr., conocido simplemente como Sal Mineo, fue un actor norteamericano, nacido el 10 de enero de 1939, en el Bronx, Nueva York. Hijo de un migrante siciliano que se dedicaba a fabricar ataúdes, Sal tuvo una infancia y adolescencia muy problemática, siendo expulsado de su colegio a los 8 años y dedicándose a pequeños robos en las calles de Nueva York con una pandilla. Su familia estaba desesperada por sacarlo de las calles y los delitos, por lo que pensaron que inscribirlo en una actividad artística podría ayudarlo. Así fue como Sal entro en Quintana School, donde se apasionó por el mundo de la danza y la actuación, lo que, afortunadamente, lo alejó de la delincuencia. Para 1951, Sal debutaba en Broadway, en obras como La Rosa Tatuada y El Rey y yo, que le valieron aplausos y reconocimientos. Dio el salto a la televisión como actor secundario de algunas series, hasta obtuvo el papel de John Crawford, en la aclamada cinta Rebelde sin causa (1955), al lado de James Dean y Natalie Wood y por la que fue nominado al premio de la Academia, en 1956, en la categoría de mejor actor de reparto. La fama le llegó de repente y a la par de que seguía desarrollando su carrera fílmica trató de involucrarse en el mundo de la música, grabando un LP de música de rock and roll. Sin embargo, también empezó a ser una presencia constante en las fiestas de Hollywood, en las que jamás ocultó su bisexualidad y se le veía tanto acompañado por hombres como por mujeres, siendo objeto de escrutinio por la prensa amarillista. Si bien eso afectó un poco su carrera, Mineo logró trabajar en notables cintas como Gigante (1956), Exodo (1960), El ocaso de los cheyenes (1964), Escape del planeta de los simios (1971) entre otras. Mineo fue asesinado por un delincuente cuando regresaba a su domicilio en Los Ángeles, el 12 de febrero de 1976, a los 37 años.