Este fin de semana llega a cartelera una de las películas de terror más controversiales del último año. Después de recibir La primera profecía en salas de cine, las audiencias mexicanas podrán ver a una niña vampira en Abigail con Melissa Barrera, pero también podrán conocer lo que sucederá con el famoso personaje de Disney en la secuela titulada Winnie Pooh: Miel y sangre 2. A un año de su estreno en la pantalla grande, este proyecto de terror regresa con una nueva entrega.
Luego de que Winnie the Pooh se convirtiera en parte del dominio público, el director Rhys Frake-Waterfield presentó al público una historia basada en los personajes de A.A. Milne, retomando al osito de playera roja y a Piglet, el pequeño cerdito rosado. Nadie se lo habría imaginado, pero este cuento infantil que alguna vez fue presentado dentro de Disney como un tierno proyecto sobre amistad, ahora mostró a Christopher Robin como el que provocó que sus amigos se transformaron en asesinos ambiciosos tras ser abandonados por él.
La película fue un fracaso y apenas consiguió una calificación de 4 por ciento en Rotten Tomatoes, pero fue un éxito en taquilla al recaudar más de 5 millones de dólares con un presupuesto de 100 mil dólares para su realización, así que no fue sorpresa para nadie que se confirmara una secuela. Después de 12 meses exactos de su estreno, este fin de semana podrás ver en tu complejo favorito Winnie Pooh: Miel y sangre 2.
Aunque algunos señalaron que el uso de los personajes fue horrible, lo cierto es que hubo algunos elementos de la película que fueron muy creativos y uno de ellos fue la música. El compositor a cargo del soundtrack fue Andrew Scott Bell, quien decidió que no debían faltar los animales cuyo alimento forma parte del título. El músico experimentó con abejas y un instrumento musical para alterar el sonido que este produciría y el resultado fue bastante interesante.
X
Bell recordó haber leído un artículo en The New Yorker sobre Tyler Thackray, un creador de contenido en Instagram que altera violines y decidió mandarle un mensaje. “Le envié un correo electrónico y le dije ‘Esto haciendo una película. Es alocada y divertida. Creo que sería interesante usar ese violín, ¿aún lo tienes?’”. Los dos se reunieron en San Francisco y recuperaron un violín que estaba rodeado de una colmena de abejas: “Había miel dentro de él, creo que en realidad cambió su sonido”, comentó. Ahora sí que Winnie Pooh: Miel y sangre se tomó literal su título.
