Cuando los actores terminan de filmar una película, suelen quedarse con algún recuerdo especial del set. Daniel Radcliffe quedándose con los anteojos de Harry Potter, Chris Hemsworth tomando cinco versiones diferentes del martillo de Thor, y Ryan Reynolds llevándose a casa el traje de Deadpool después de terminar la primera película, son sólo algunos ejemplos de cómo las estrellas conservan un accesorio, una prenda de vestuario o, en algunos casos, un objeto icónico que encapsula la esencia del personaje que interpretaron.
Sin embargo, cuando se trata de Tom Hardy, no se conforma con cualquier recuerdo, y en su más reciente éxito dentro de la plataforma Max, decidió llevarse un souvenir que grita rebeldía y adrenalina por donde se le vea. Hardy, conocido por su compromiso con cada personaje que interpreta, quedó tan conectado con esta película que no pudo evitar llevarse un pedazo de la historia con él. Sorprendentemente, no se llevó un simple accesorio o un trozo del guión sino que tomó es algo que cualquier amante de la velocidad envidiaría.
Así es, el actor británico se quedó con una de las motocicletas utilizadas en El club de los vándalos, la película más vista en Max en los últimos días. La cinta, inspirada en eventos reales, se sumerge en el submundo de las pandillas de motociclistas y retrata con crudeza la vida de aquellos que encuentran en la carretera su verdadera identidad. Hardy, quien encarna a un personaje con un fuerte vínculo con la cultura biker, no sólo se metió en el papel con una actuación intensa, sino que decidió llevarse consigo una parte fundamental de esa experiencia: una de las impresionantes motos que protagonizan las persecuciones y escenas de acción más memorables del filme.
Variety
No es raro que los actores quieran quedarse con algo del set, pero pocas veces se llevan un vehículo entero. En el caso de Hardy, la decisión tiene mucho sentido ya que durante el rodaje, el actor pasó horas perfeccionando su técnica de conducción, sumergiéndose en la mentalidad de su personaje y, en el proceso, creando un vínculo real con la motocicleta. No era sólo un accesorio más en la película sino toda una extensión de su personaje, un símbolo de la libertad, la rebeldía y el espíritu indomable que define la historia de El club de los vándalos.
Rolling Stone
Pero más allá de la moto, el verdadero impacto de El club de los vándalos ha sido su éxito en la plataforma Max. La película ha cautivado a la audiencia con su historia cargada de adrenalina, conflictos personales y un retrato crudo de la lealtad y la traición dentro de una comunidad de motociclistas. La actuación de Hardy ha sido uno de los grandes atractivos de la cinta, consolidándolo una vez más como uno de los actores más versátiles y carismáticos de la actualidad. Hoy mismo puedes ver esta cinta en Max para que veas la moto que Hardy se llevó a casa.