Hasta para ver series hay que ser sumamente honestos. No todos tienen el tiempo ni la energía suficiente para clavarse en producciones de mil temporadas como Stranger Things, Game of Thrones o Friends. Es cierto que son clásicos, íconos, y probablemente algunas de las series más famosas en la historia de la televisión, pero empezarlas a ver desde cero implica meses de compromiso y muchas horas pegado a la pantalla que se convierten en desveladas de nivel máximo.
Por eso, cuando aparece una miniserie que puedes devorar en una noche, es como encontrar un tesoro perdido en medio del mar que es el catálogo de Netflix. Y si además tiene una historia intensa, personajes que no se andan con rodeos y una buena dosis de erotismo, inmediatamente el plan de viernes por la noche está resuelto y ya hay mucho qué ver.
Supersex es una producción italiana que es ideal para ver solo o mejor aún con alguna compañía especial. La serie tiene drama, sensualidad y una historia que va más allá de lo que parece a simple vista. Y aunque es una simple miniserie de sólo siete episodios, está dando mucho de qué hablar y no sólo por sus escenas subidas de tono o los temas tan íntimos que toca.
Netflix
Supersex está inspirada en la vida real de Rocco Siffredi, una leyenda del cine para adultos en Europa, cuya carrera fue tan polémica como fascinante. Pero, a diferencia de otras biopics que son provocación pura sin sentido, esta serie sorprende por dar un enfoque más íntimo y humano a la estrella de contenido para mayores de edad. La historia no se trata sólo del personaje público, sino del hombre detrás del mito, sus conflictos, contradicciones y la doble vida que llevó durante años.
La serie te mete de inmediato en el mundo de Rocco, interpretado por Alessandro Borghi. El actor de origen italiano le da vida a este ícono del entretenimiento adulto de una forma que mezcla carisma, vulnerabilidad y fuerza. Con todo y lo subido de tono, lo que más impacta es cómo explora la identidad, el deseo, la familia y lo que significa ser hombre en un entorno que exige perfección constante.
Netflix
Los episodios están llenos de flashbacks que nos ayudan a entender cómo un joven tímido y retraído llegó a convertirse en un símbolo sexual internacional. Desde su infancia con raíces conservadoras hasta sus días en sets rodeados de luces y cámaras, Supersex va construyendo una narrativa donde el cuerpo está presente, pero también el alma.
Lo que tienes que saber es que Supersex no es para ver con toda la familia. Tiene una clasificación para adultos bastante clara, y sí, hay desnudos, escenas eróticas y situaciones que pueden incomodar a los más tímidos. Pero también hay un lado de profundidad, reflexión y lo que pasa cuando lo íntimo se vuelve público.