Se viene algo realmente grande y se tratan de pisadas de dinosaurios con el estreno de Jurassic World: Renace. La nueva entrega de la franquicia de seres prehistóricos, que ha marcado generaciones completas desde que Steven Spielberg nos voló la cabeza en 1993, llegará a las salas de Cinépolis y Cinemex el próximo 4 de julio. Y esta vez, los dinosaurios vendrán acompañados de los rostros de Scarlett Johansson y Jonathan Bailey encabezando el elenco de esta aventura.
Lo cierto es que, a diferencia de las entregas anteriores y a juzgar por las primeras imágenes, Jurassic World: Renace promete dar un tono más oscuro y salvaje, apegado al material original de la novela. Con toda la emoción que se siente en el aire, ha surgido una pregunta muy lógica, sobre todo, entre padres de familia: ¿es buena idea llevar a los niños al cine a ver esta película? La realidad es que los dinosaurios suelen ser un imán para los más pequeños pero es importante saber que Jurassic World: Renace no es precisamente Barney y sus amigos.
Aunque la película claramente tiene criaturas fascinantes, acción espectacular y escenarios increíbles que podrían atraer la atención de los niños, el tono de Jurassic World: Renace no es precisamente hecho para ellos. De hecho, una de las primeras cosas que debes saber es su clasificación oficial en México es "B", y esto significa que está recomendada para adolescentes a partir de los 12 años.
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Básicamente, esto implica que la historia incluye temas y escenas que pueden no ser apropiados para niños pequeños. No estamos hablando sólo de rugidos o persecuciones, sino de momentos tensos, sustos inesperados, peligro real y un nivel de violencia que, aunque no es extremo, puede resultar inquietante para los más chicos de la casa.
Además, hay una carga emocional más densa. Jurassic World: Renace quiere contar una historia más madura, con implicaciones científicas y éticas, con personajes que enfrentan dilemas existenciales, corporaciones peligrosas y, por supuesto, una amenaza que va mucho más allá de un simple dinosaurio suelto. Así que si pensabas llevar a niños de entre 5 y 11 años que ya han visto películas como Jurassic World y Jurassic World: El reino caído o incluso la serie animada Campamento Cretácico, probablemente no sea la mejor idea.
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En cambio, los adolescentes probablemente disfrutarán más esta entrega. Especialmente si ya están acostumbrados a las historias de ciencia ficción y acción intensa tipo Godzilla vs. Kong, Avatar: El camino del agua o incluso The Last of Us. La narrativa está pensada para un público que pueda seguir tramas más complicadas, y que no se espante tan fácilmente si un dinosaurio se come a alguien de un bocado.
