Recordar a Arnold Schwarzenegger es hablar de cine de acción, un físico impresionante, frases legendarias y explosiones por donde sea. Desde que el actor apareció en el Terminator y soltó su famoso dicho "I'll be back", el público se dio cuenta de que el austriaco no se andaría con rodeos. Un par de años más tarde con Depredador, El vengador del futuro y hasta El último gran héroe, el llamado "Governator" se convirtió en uno de los íconos más grandes del cine de los ochenta y noventa.
Lo cierto es que ambas décadas fueron una época dorada llena de poder, fuerza y rudeza en la que Arnold no era el único que estaba en la cima. Al otro lado del ring, con su icónica cinta roja en la cabeza, también se encontraba Sylvester Stallone, el mismísimo Rambo, el siempre querido Rocky Balboa, y protagonista de varias cintas que también llenaban las salas de cine. La dupla era como una especie de Goku y Vegeta de Dragon Ball Z: rivales eternos, cada uno queriendo demostrar que era el más duro del cine.
Y aunque el tiempo pasa y las peleas en las taquillas ya se quedaron atrás, nadie esperaba lo que Arnold diría sobre Sly hoy en la actualidad cuando el actor de El regalo prometido reconoció que Stallone es mejor que él. Esto no lo dijo entre bromas, sino en una charla bastante honesta en la que confesó que, aunque ambos construyeron carreras espectaculares, Stallone tiene más talento actoral que él.
La Nación
Fue en una entrevista con la revista People en la que Arnold soltó la bomba con toda tranquilidad. "Es mucho más genuino, mucho más vulnerable y más consciente de sus sentimientos. Cuando se enoja, simplemente se enoja (...) Por eso es tan bueno actuando, porque intuye las cosas al instante", dijo sobre su antiguo némesis cinematográfico. "Lo admiro de verdad, lo quiero. Es simplemente una persona diferente a mí", contó acerca de cómo es su relación en la actualidad, lejos de las rencillas y las comparaciones.
Como muchos sabrán, durante años, Schwarzenegger y Stallone compitieron ferozmente. En los ochenta no se podía mencionar a uno sin que alguien lo comparara con el otro al instante. Incluso, cuando uno estrenaba una cinta, el otro ya estaba filmando otra más intensa y que prometía mucha más acción y explosiones. Aunque jamás fue confirmado, se decía que trataban de sabotearse entre ellos, buscando historia ridículas para que el otro los aceptara.
Fotogramas
Pero como si se tratara de una buena película, esta enemistad tuvo su redención al final de cuentas. Con el paso del tiempo, Arnold y Stallone dejaron atrás las peleas, maduraron y hasta colaboraron juntos en Los Indestructibles. Hoy, lo importante es que ambos regalaron al mundo una era del cine que jamás se olvidará y eso sí que no tiene rival.
