Además de la pérdida de estrellas del stand-up y producciones coreanas, la escena del entretenimiento continúa de luto ante el fallecimiento de una conductora de TV Azteca, quien murió súbitamente a los 31 años de edad el pasado domingo 13 de julio. Fue la misma televisora la que compartió la noticia a través de sus redes sociales, siendo confirmadas por las autoridades del hospital donde fue recibida.
De acuerdo con información de UNOTV, la conductora presentó un fuerte dolor abdominal una noche antes y fue trasladada a un hospital para recibir atención médica, pero su malestar se complicó en el camino y al llegar al que es considerado el mejor hospital en Honduras, ya había fallecido. En una entrevista para Radio América, el representante de la institución reveló que “Ella llegó sin vida al Hospital Escuela; en consecuencia, no fallece en el centro hospitalario, por lo que no requirió de asistencia médica”.
Instagram
Antes de convertirse en presentadora para TV Azteca, Mayra Tercero participó en programas como Bailando por un sueño Honduras, Calle 7 Honduras y Q’hubo TV. Paralelo a su carrera en la televisión, la conductora se encontraba estudiando odontología en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, además de que también fue representante de gimnasia en competencias internacionales.
Entre las palabras de condolencias que se compartieron por su repentina muerte, TV Azteca Honduras compartió en sus redes sociales: “Su compromiso y alegría trascendieron la pantalla, convirtiéndola en un símbolo de inspiración para quienes la conocieron”, añadiendo una recopilación de fotografías de su presencia en el set. “Aunque ya no esté con nosotros, su esencia sigue viva en cada sonrisa que dejó y en el recuerdo imborrable que permanece en nuestros corazones”.
Instagram
A pesar de las declaraciones compartidas por las autoridades del hospital y sus familiares, no se reveló la causa de muerte oficial de Mayra Tercero. Sin embargo, las personas cercanas a la bailarina, conductora de deportes y reportera, temen que se haya tratado de negligencia médica por el personal del hospital privado en Tegucigalpa, Honduras.