Después de casi tres décadas de saltar de aviones, escalar rascacielos imposibles y desactivar bombas en el último segundo, Tom Cruise se despidió del agente Ethan Hunt en Misión: Imposible. La saga que durante años nos mantuvo al borde de la butaca y que convirtió cada estreno en un evento global terminó con La sentencia final. Pero aunque la conclusión de la historia de Hunt marcó el cierre de una era, Paramount Pictures, el estudio detrás de estas aventuras, no tiene planes de bajar el ritmo.
El legado de Paramount no solo vive en los espías intrépidos, sino también en galaxias lejanas con Star Trek y en blockbusters que definen generaciones. Y ahora, en una movida que podría cambiar las reglas del juego, el estudio busca llevar a la gran pantalla una franquicia que no pertenece al cine sino a los videojuegos. Esta saga ha vendido más de 500 millones de copias alrededor del planeta y prácticamente inventó la forma moderna de jugar disparos en primera persona.
¿'Call of Duty' en el cine?
De acuerdo con reportes, Paramount estaría negociando los derechos para producir películas basadas en el universo de Call of Duty. Y este no es cualquier movimiento: estamos hablando de una de las series más exitosas en la historia del entretenimiento, con ventas multimillonarias, campeonatos de eSports y una base de fans que se extiende por todas las generaciones.
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La idea no suena tan descabellada. Después de todo, si adaptaciones como The Last of Us demostraron que los videojuegos pueden brillar en la pantalla chica con calidad cinematográfica, nada podría impedir que una franquicia bélica como Call of Duty hiciera lo mismo en la gran pantalla.
Un campo de batalla lleno de posibilidades
Lo interesante de Call of Duty es que no hay una sola historia que seguir. La saga ha explorado distintos periodos: desde la Segunda Guerra Mundial hasta futuros distópicos llenos de tecnología avanzada. Esto abre un abanico enorme de opciones para el cine, desde un conflicto histórico con tono realista, al estilo Rescatando al Soldado Ryan, o algo más cercano a la ciencia ficción militar, como Halo.
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Pero como siempre, los seguidores ya empezaron a opinar en redes sociales. Por un lado, está la emoción de ver a Call of Duty convertido en una película con todo el poder de Paramount detrás. Pero también hay escepticismo: las adaptaciones de videojuegos al cine no siempre han salido bien, y como ejemplo, están Asassin's Creed y Resident Evil.
La pregunta es si Paramount podrá evitar caer en los clichés y, en lugar de intentar copiar el videojuego tal cual, logre darle identidad cinematográfica. Nadie quiere ver una película que se sienta como una misión jugada en consola: lo que los fans esperan es una experiencia que capture la adrenalina del juego, pero con personajes y emociones que atrapen.