Después de conquistar Hollywood con La forma del agua, con la que ganó varios premios Oscar, incluido Mejor Director y Mejor Película, y volver a hacer lo mismo con su versión de Pinocho para Netflix, Guillermo del Toro sigue demostrando que es uno de los cineastas más creativos y únicos de nuestra época. El mexicano no se detiene y ahora se prepara para lanzar uno de los proyectos más ambiciosos de toda su carrera: Frankenstein.
Este nuevo trabajo no es solo otra adaptación de la clásica novela de Mary Shelley, sino una reinterpretación con el sello personal de Del Toro. Con un elenco de lujo, efectos visuales únicos y esa mezcla de fantasía, oscuridad y ternura que lo caracteriza, el director jalisciense busca darle vida a una criatura que ya es parte del imaginario colectivo. Y aunque el rodaje fue todo un reto, lo que más ha llamado la atención es cómo el propio Guillermo describió sus emociones después de terminarlo.
Una relación íntima con sus monstruos
Del Toro siempre ha dejado claro que siente una conexión especial con los monstruos. Desde El espinazo del diablo y El laberinto del fauno hasta sus éxitos más recientes, ha demostrado que, para él, las criaturas no son simples villanos sino reflejos de nuestra propia humanidad. Con Frankenstein, no podría haber sido de ninguna otra manera.
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Según un informe del medio France 24, el cineasta confesó que al concluir la filmación de Frankenstein sintió una especie de vacío inesperado, un estado de ánimo que él mismo llamó "depresión postparto". Explicó que, tras vivir durante tanto tiempo con los personajes y dedicarle cada pensamiento al proyecto, la despedida fue agridulce: por un lado, sintió alegría de haber completado algo tan grande, y por el otro, la tristeza de dejarlos ir.
Parte del encanto de Guillermo del Toro siempre ha sido su forma de hablar con plena honestidad. No teme mostrarse vulnerable ni reconocer que el arte también duele. Esa franqueza es lo que lo hace cercano al público y lo distingue dentro de la industria. La confesión sobre su "depresión postparto" no sólo es una anécdota curiosa: refleja el grado de compromiso que pone en cada obra.
Un proyecto muy deseado
No es exageración decir que Frankenstein era un sueño pendiente para Guillermo del Toro. Durante años habló de su deseo de adaptar la novela de Mary Shelley, pero las circunstancias nunca se lo permitían. Ahora, con más experiencia y el reconocimiento internacional en la bolsa, pudo finalmente darle forma a su visión.
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Aunque todavía faltan algunos meses para su estreno, lo que se sabe ya genera expectativa. Frankenstein contará con actuaciones de Jacob Elordi, Mia Goth y Oscar Isaac, quienes darán vida a personajes clave en esta nueva versión. El estilo visual de Del Toro, sumado a su capacidad para dotar de emociones profundas a las criaturas, promete una película oscura, poética y con momentos desgarradores.
