A lo largo de la historia del cine, Hollywood nos ha regalado villanos inolvidables que marcaron generaciones con sus actuaciones, como Anthony Hopkins siendo Hannibal Lecter en El silencio de los inocentes, Heath Ledger como El Joker en The Dark Knight, y Alan Rickman como el inolvidable Hans Gruber en Duro de matar. Pero a esta lista de antagonistas también se suma un actor austriaco-alemán, quien sorprendió al mundo con un papel que lo catapultó a la fama internacional gracias a su cinismo y crueldad.
Esta consagración llegó con Bastardos sin gloria, dirigida por Quentin Tarantino, en donde el coronel Hans Landa es un oficial nazi inteligente, manipulador y carismático, que posee la capacidad de intimidar con solo su presencia, ganándose el apodo del "cazador de judíos".
Esto convirtió en uno de los villanos más inquietantes del cine moderno, cuya actuación resultó tan impactante que muchos críticos lo consideran uno de los mejores personajes escritos por Tarantino en toda su trayectoria cinematográfica.
¿Cómo obtuvo este papel Christoph Waltz?
Universal Pictures
Christoph Waltz nació en Viena, Austria, el 4 de octubre de 1956, en una familia ligada al arte escénico donde sus padres eran diseñadores de vestuario y su abuelo fue actor. Estudió actuación en Viena y posteriormente en Nueva York, donde perfeccionó su técnica, y antes de triunfar en Hollywood, desarrolló una extensa carrera en Europa, principalmente en la televisión y el teatro.
Después obtuvo el papel de Hans Landa en Bastardos sin gloria gracias a un proceso muy particular, en el que Quentin Tarantino buscaba a un actor que pudiera manejar con naturalidad los varios idiomas que requería el papel (alemán, francés, inglés e italiano), además de resultar extremadamente carismático e inteligente.
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De hecho, Tarantino llegó a pensar que tendría que abandonar la película porque nadie lograba dar la complejidad lingüística y la intensidad actoral que él buscaba para Landa, hasta que apareció Christoph Waltz con un dominio perfecto de varios idiomas.
Durante la audición, Waltz sorprendió al director con su capacidad para alternar entre lenguas con fluidez y al mismo tiempo dotar a Hans Landa de un magnetismo inquietante. Tarantino declaró que fue "un regalo caído del cielo", pues no solo resolvió el problema técnico del guion, sino que también elevó al personaje al punto de convertirlo en uno de los villanos más icónicos del cine moderno.
Del Coronel Hans Landa de la SS a Mejor actor de reparto para La Academia
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Pero éxito de Waltz no se detuvo ahí, sino que en 2010 recibió su primer Premio Oscar a Mejor actor de reparto por el papel de Landa, y tres años más tarde repitió la hazaña con un segundo Oscar en la misma categoría por su papel en Django sin cadenas -también de Tarantino-, donde interpretó al doctor King Schultz, como un cazador de recompensas que ayudaba al protagonista a liberar a su esposa.
Actualmente Christoph Waltz es considerado uno de los grandes actores de su generación, cuya trayectoria no solo refleja la importancia de su trabajo en producciones de Quentin Tarantino, sino también su versatilidad para moverse entre distintos personajes y proyectos. Para verlo en Django sin cadenas bastará que cuentes con una suscripción en Apple TV+, mientras que Bastardos sin gloria está disponible en Netflix.