En el competido catálogo de Netflix México, donde títulos como Monstruo: La historia de Ed Gein, El genio y los deseos y Las muertas encabezan el top de popularidad, las producciones europeas también están ganando terreno con historias intensas, realistas y emocionalmente absorbentes. Entre ellas, destaca La enfermera, una miniserie danesa de solo cuatro episodios que combina el suspenso criminal con el drama psicológico y que promete mantenerte al borde del asiento de principio a fin.
¿Por qué ver ‘La enfermera’ esta noche en Netflix?
Inspirada en el libro The Nurse: Inside Denmark’s Most Sensational Criminal Trial, escrito por el periodista Kristian Corfixen, la serie revive el caso de Christina Aistrup Hansen, una enfermera danesa acusada de asesinar pacientes en un hospital local. Bajo la dirección de Kasper Barfoed (responsable del celebrado thriller The Chestnut Man), esta producción se distingue por su ritmo conciso y su atmósfera inquietante, que recuerda a lo mejor del cine nórdico de suspenso.
La historia inicia en 2012, cuando un hombre muere misteriosamente tras ser hospitalizado, aunque el informe médico sugiere un aparente suicidio. Dos años después, Pernille Kurzmann Larsen, una joven enfermera recién graduada interpretada por Fanny Louise Bernth, comienza su primer trabajo en el mismo hospital sin imaginar que allí descubrirá una verdad tan siniestra como inimaginable.
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En sus primeros días, Pernille conoce a Christina Hansen (Josephine Park), una enfermera carismática, admirada por todos y capaz de mantener la calma ante cualquier emergencia. Entre ambas surge una amistad inmediata: trabajan juntas, comparten turnos de noche y hasta momentos de ocio fuera del hospital. Sin embargo, poco a poco, la joven comienza a notar irregularidades que despiertan su inquietud.
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La sospecha surge cuando una paciente muere inexplicablemente y Pernille encuentra una jeringa con restos de diazepam en la basura. Ese hallazgo, aparentemente trivial, se convierte en el punto de partida de una silenciosa investigación personal. Mientras los médicos justifican las muertes y la institución evita preguntas, Pernille se enfrenta a un dilema moral: callar y proteger su carrera, o enfrentarse a una compañera que parece ocultar algo terrible.
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Lo más interesante de La enfermera es su enfoque: no presenta a Christina como un monstruo evidente, sino como una figura compleja, carismática y humana, lo que hace más escalofriante su retrato. Josephine Park logra una interpretación contenida y ambigua, mostrando a una mujer adicta a la adrenalina de salvar vidas, incluso cuando ella misma provoca las emergencias. Esta ambigüedad moral convierte cada episodio en un ejercicio de tensión constante.
En solo cuatro capítulos, La enfermera logra lo que muchas series no alcanzan en varias temporadas: mantener el suspenso, desarrollar personajes creíbles y ofrecer una reflexión sobre la delgada línea entre el heroísmo y la locura. Es una historia breve, contundente y fascinante, ideal para quienes buscan una experiencia intensa que pueda verse de un solo golpe.