¿Quién no disfruta de una adictiva serie subida de tono para aliviar el estrés de la semana? Entre las series de Netflix hay distintas alternativas para todos los gustos, pero en esta ocasión se trata de una historia protagonizada por Naomi Watts en la que la ética moral es inexistente.
Bajo el nombre de Gypsy se sumó esta serie a la plataforma en 2017 para dividir al público y la crítica dejando a los fans con ganas de mucho más.
La terapeuta que traspasa los límites de lo laboral
Gypsy se describe como un thriller psicológico que gira en torno a Jean Holloway (Naomi Watts), terapeuta de Nueva York con una vida aparentemente acomodada. Tiene una hija, a su marido Michael (Billy Crudup) y un trabajo estable; todo lo que pone a tambalear cuando sus deseos la impulsan a cruzar los límites con sus pacientes.
Con un sentimiento de estancamiento Jean comienza a involucrarse en secreto con personas cercanas a sus pacientes de quienes escucha en las sesiones privadas con cada uno. Especialmente desarrolla una obsesión por la ex-pareja (Sophie Cookson) de uno de sus pacientes y una doble vida se asoma para Jean.
Netflix
¿Hasta qué punto sería capaz de llegar Jean para colarse en la vida de esta mujer? A lo largo de 10 episodios Gypsy explora los límites que la protagonista decide cruzar y la forma en que sus deseos consiguen ser más fuertes que la razón.
La serie que dejó a la audiencia esperando por más
Tan sólo seis semanas después del estreno de Gypsy Netflix optó por cancelarla sin un motivo concreto, aunque muchos medios argumentaron que podía ser debido a su mala recepción o baja audiencia lo que contrasta un poco con las reseñas y puntuación de la serie.
Netflix
Si bien la crítica en efecto no recibió muy bien a la serie, dándole una aprobación de 40% en Rotten Tomatoes, la cosa con el público es diferente pues le otorgó un 84%. Además, en sitios de opinión y redes sociales la audiencia ha confesado haber sido "cautivada" por Gypsy elogiando principalmente el trabajo de Watts como protagonista.
Aunque muchos fans dijeron que la serie merecía una segunda temporada para seguir abordando la mente de Jen y su actuar, hasta ahora no queda más que repetir los episodios disponibles y disfrutar cada uno ante la negativa de Netflix por renovarla.