Este año sin duda ha sido una gran temporada para el cine con grandes estrenos desde películas internacionales como Lilo y Stich o Cómo entrenar a tu dragón y por supuesto también las películas nacionales, que en términos de números el cine mexicano tuvo grandes éxitos en cartelera con una lista conformada por Mesa de regalos, Soy Frankelda, Mirreyes vs Godínez: Las Vegas y ¡Qué huevos Sofía!, entre varias más.
Sin embargo, para que varias películas tengan éxito, debe haber en la lista filmes que no hayan logrado el mismo impacto y que terminaron quedando hasta el final de la lista. En cuanto a comedia mexicanas existe una que pasó bastante desapercibida a comparación de los títulos mencionados.
La comedia mexicana que no tuvo suerte este año
Una de las producciones mexicanas más criticadas este año fue Nuestros tiempos, una producción original de Netflix con Lucero y Benny Ibarra en el protagónico, desafortunadamente las fuertes críticas llegaron desde su estreno en junio de este año y en sitios web como IMDb el filme tiene una calificación de 5.4 de 10.
Pero dejando de lado el mundo de streaming y tomando en cuenta los estrenos en las salas de cine, la comedia mexicana que quedó muy por debajo en cuanto a números de taquilla fue Desastre en familia, una película protagonizada por Itatí Cantoral y Ariel Miramontes.
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El fracaso de taquilla ante grandes producciones
Un desastre en familia estrenó en cartelera el pasado septiembre de este año con una historia que busca ser un tipo de remake a la producción de Hollywood, Un viernes de Locos de Lindsay Lohan y Jamie Lee Curtis, en una versión mexicana que sigue la historia de una familia que despierta con sus cuerpos intercambiados, por lo que tendrán que vivir la vida del otro, mientras encuentran la forma de poder volver a la normalidad. Similar a lo que vimos en la secuela lanzada este año con Otro viernes de locos.
Escrita y dirigida por Manuel Caramés y con una duración de 95 minutos, Desastre en familia pasó muy desapercibida en su mes de estreno en la cartelera de México y podemos pensar que parte del fracaso se debe a que durante el mes de septiembre llegaron a cartelera títulos como Demon Slayer: Castillo Infinito, El Conjuro 4: Últimos Ritos, Camina o Muere y Una Batalla Tras Otra, todas estas con enormes cifras de números en cuanto a recaudación.
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Desastre en familia logró una recaudación de taquilla de aproximadamente casi 19 millones de pesos, y aunque podría parecer una buena suma de dinero en comparación, la película mexicana Soy Frankelda recaudó 19 millones de pesos tan solo en su primera semana de exhibición y hasta el momento las cifras indican que lleva 50 millones de pesos recaudados.
Dos meses después de su debut en cartelera, Desastre en familia llegó a streaming a través de Vix, donde el filme puede tener una segunda oportunidad. A través de sitios web como IMDb el filme cuenta con una calificación de 5.5 de 10.