La relación entre Keanu Reeves y Charlize Theron ha dado pie a algunas de las colaboraciones más recordadas de finales de los noventa y principios de los 2000. Tras coincidir en el drama sobrenaturalEl abogado del diablo, ambos se reencontraron en una historia completamente distinta llamada Dulce noviembre, la película en la que Reeves dejó de lado cualquier atisbo de violencia cinematográfica para abrazar el romance más melancólico y conmovedor.
Keanu Reeves: de asesino letal a romántico empedernido
Aunque Reeves se ha consolidado como uno de los grandes héroes de acción de nuestro tiempo, sobre todo gracias a John Wick, su carrera también está marcada por personajes sensibles, vulnerables y entregados al amor. En Dulce noviembre interpreta a Nelson Moss, un publicista rígido y obsesionado con el trabajo que ve su vida dar un vuelco cuando conoce a Sara Deever, interpretada por Charlize Theron.
La película, que ya se encuentra disponible en HBO Max, sigue el encuentro entre Nelson y Sara durante un examen de conducir que él, sin querer, arruina para ella. Lo que parece un choque sin importancia acaba convirtiéndose en una propuesta sorprendente: Sara le pide que viva con ella durante el mes de noviembre para enseñarle a reconectar con la vida. Sin embargo, detrás de su energía libre, su comportamiento excéntrico y su entusiasmo contagioso se oculta un secreto devastador que marca el rumbo de su relación y convierte la película en un romance profundamente trágico.
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La química entre Keanu Reeves y Charlize Theron que conquistó a Hollywood
Pese a las críticas mixtas que recibió el filme, muchos destacaron la fuerza interpretativa de Reeves y Theron. A través de gestos sutiles, miradas que contradicen los diálogos más cursis y una conexión palpable, ambos lograron elevar un guion que a veces caía en excesos melodramáticos. Reeves sorprende por su calidez progresiva, mientras que Theron dota a su personaje de dignidad y delicadeza incluso en los momentos más difíciles.
Uno de los detalles más curiosos de la película es la existencia de un cachorro enviado a Nelson como parte de la historia de amor. Años después, los directores de John Wick descubrieron que este elemento coincidía con el detonante emocional de su propia película: un hombre que recibe un perro como último gesto de una persona amada que está por morir. Ni Chad Stahelski ni David Leitch habían notado el paralelismo hasta que periodistas y fans se los mencionaron, lo que convirtió a Dulce noviembre en un antecedente involuntario del universo Wick.
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Una amistad que ha perdurado por décadas
Más allá del romance ficticio, Dulce noviembre consolidó la amistad real entre el actor de Matrix y la actriz de Mad Max: Furia en el camino, una relación que ambos describen como sólida, respetuosa y marcada por una complicidad que se mantiene desde hace más de 30 años. Aunque no han vuelto a protagonizar otro proyecto juntos, Theron ha insinuado que no descarta una tercera colaboración si el papel adecuado aparece.