Anya Taylor-Joy se ha convertido en una de las actrices más versátiles y magnéticas de su generación. Desde su celebrado debut en La bruja, donde su presencia inquietante marcó un antes y un después en el cine de terror contemporáneo, hasta su participación en Gambito de dama, producción que la catapultó a la fama mundial, la intérprete ha demostrado una sensibilidad única para construir personajes al límite.
Su paso por filmes como Fragmentado, Emma y El misterio de Soho confirma su habilidad para desplazarse entre géneros sin perder autenticidad ni fuerza dramática. En años recientes, su presencia en superproducciones la ha consolidado como una figura imprescindible de Hollywood. Además de interpretar a la joven protagonista de Furiosa: de la saga Mad Max, mostró su faceta más luminosa al dar voz a la Princesa Peach en Super Mario Bros: La película y confirmó su magnetismo en títulos como Los nuevos mutantes.
Anya Taylor-Joy en un feroz retrato de los vikingos
En El hombre del norte, Taylor-Joy comparte pantalla con Alexander Skarsgård bajo la dirección de Robert Eggers, cineasta reconocido por su minucioso rigor histórico y su visión profundamente atmosférica. La película plantea una historia de venganza inspirada en las leyendas nórdicas que también dieron origen a Hamlet, siguiendo el brutal camino del príncipe Amleth y las violentas tensiones que marcan su destino.
Focus Features
William Short, historiador especializado en guerra vikinga, calificó la película como “perfecta” en múltiples aspectos, otorgándole un 9 sobre 10 por su fidelidad a las fuentes y por la representación del espíritu berserker. Destacó secuencias como el asalto en el que Amleth escala una estructura con un hacha y la forma en la que el filme captura la ferocidad ritual que antecedía a las batallas. Aunque señaló pequeños desajustes, como el uso incorrecto del seax o el formato del combate organizado, concluyó que pocas producciones contemporáneas investigan con tanto rigor la cultura nórdica.
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La reconstrucción de una leyenda desde el horror y la mitología
Eggers retoma los elementos sobrenaturales de la tradición vikinga sin caer en la caricatura. Presencias como los cuervos de Odín, los rituales chamánicos o las visiones proféticas tiñen la narrativa de un halo místico sutil pero inquietante, cercano al tono de La bruja o incluso de su reciente versión de Nosferatu. De esta manera, el filme se mueve entre el drama histórico, el horror simbólico y la épica más cruda, construyendo un universo narrativo que respeta la oscuridad original del mito.
A pesar de su ambición estética y sus elogios críticos, El hombre del norte no encontró éxito comercial en su estreno en 2022, recaudando apenas 69.9 millones de dólares, por debajo de su presupuesto. Sin embargo, su llegada al streaming la transformó en un fenómeno tardío, reivindicando su fuerza visual y su narrativa sombría frente a un público que la descubrió sin las expectativas del circuito comercial. Tres años después, la película ha conquistado a una nueva audiencia desde su llegada a Netflix, consolidándose como uno de los grandes títulos históricos del catálogo.