El director Lorenzo Hagerman también fue corresponsal de guerra, carrera que inicio en 1991 como corresponsal en la guerra de la antigua Yugoslavia. También ha sido director de fotografía en cintas como Heli y Presunto Culpable.
Para el director, el documental pretende ser uno que celebre la vida, nunca sobre el record de la persona más longeva del mundo. Busca mostrar a los adultos mayores como una parte importante de la sociedad.
Hagerman ha asegurado en varias entrevistas que hacer la cinta fue una experiencia divertida y enriquecedora. Para él, las personas que aparecen en el documental son un ejemplo para los jóvenes, puesto que no se rinden, siguen en plenitud, con sueños y proyectos, con el deseo de seguir viviendo y creciendo.
La idea del proyecto viene del interés de Hagerman de cómo la perspectiva del tiempo va cambiando con la edad, ver cuando se rebasan las expectativas de vida, la manera en que se ve y analiza el pasado, el presente y el futuro desde determinada edad.