A raíz del nacimiento de la bebé de Jessica, la vida para ella y Bruna se ha vuelto más complicada, pues las dos no pueden hacer bien su trabajo porque se turnan para cuidar al bebé. Debido a esto, Bruna comienza a llenarse de deudas porque casi no ha tenido clientes y la mayoría no le dan grandes ingresos, pero finalmente luego de dos años de estar padeciendo en el apartahotel, Bruna decide formar parte de Paradise Club. Éste es el nuevo club nocturno de moda y ella sabe que si ingresa ahí, su vida volverá a resolverse por lo que hace todo lo posible para tener un nuevo trabajo en ese sitio. Gracias a su experiencia y estilo único, Bruna consigue el empleo y aunque en verdad estará rodeada de grandes lujos, clientes más comprometidos y que dejan buenas propinas, la joven también correrá grandes riesgos pues nada en ese mundo viene sin alguna consecuencia; entre más grande sea la fama y exclusividad, más podría perder.