Solo China pudo salvar la mejor franquicia de ciencia ficción de todos los tiempos
Liz Hernández
-Redactora
Comparto cumpleaños con Chantal Akerman y Forrest Gump. Crecí aterrorizada por David Lynch y soy la fan número uno de Antoine Doinel.

Su futuro se veía perdido, pero esta famosa saga de ciencia ficción se salvó luego de su estreno en China, trayendo de regreso a la pantalla grande a uno de los actores más aclamados de los 80.

Fue a mediados de los años 80 cuando estrenó en cines una de las películas más sobresalientes de la ciencia ficción. Durante esa década hubo lanzamientos de largometrajes que ahora se consideran clásicos, como Star Wars - Episodio V: El imperio contraataca de Irvin Keshner en 1980 o Robocop en 1987, pero hubo una cinta que se posicionó como la más famosa de todas a pesar de venir de un director prácticamente desconocido por la industria y las audiencias.

Con un actor como protagonista que también se encontraba lejos de la fama, este proyecto fue uno de los más taquilleros de 1984 y además se convirtió en un hito dentro del género gracias a sus avances tecnológicos e impresionantes efectos visuales. Con apenas 1 hora y 47 minutos de duración, esta película de James Cameron se ganó un lugar en el podio de las mejores producciones futuristas, cuyo éxito desarrolló una saga.

Tal como lo sospechabas, nos referimos a Terminator. La historia sobre el asesino del futuro que tiene como propósito asesinar a Sarah Connor pues está destinada a procrear al hombre que salvará a la humanidad de la extinción. Arnold Schwarzenegger se volvió la figura principal del cine de acción y volvió a aparecer en dos entregas más de la franquicia, siendo Terminator 3: La rebelión de las máquinas la última.

Conforme avanzaron las producciones, la franquicia comenzó a caer de nivel y las cosas empeoraron para el estreno de Terminator Génesis en 2015, protagonizada por Emilia Clarke y con Schwarzenegger de vuelta en el elenco después de ausentarse en una cinta. De los 78 MDD (millones de dólares) recaudados con un presupuesto de poco más de 6 MDD en 1984, la quinta película pasó a ser producida con 155 MDD y únicamente consiguió 90 MDD en el mercado estadounidense.

El futuro de la franquicia parecía perdido, pero tras su llegada a cines chinos Terminator Génesis recuperó 112.8 MDD, aumentando considerablemente el poco éxito que había conseguido el largometraje. Fue entonces que los estudios decidieron continuar con la saga y produjeron una entrega más, estrenada en 2019 con el título de Terminator: Destino oculto, pero no era una cinta cualquiera, sino una que seguía directamente con el legado del cineasta canadiense.

Después de estrenar la aclamada Terminator 2: Día del juicio final en 1991, James Cameron regresó a la franquicia con Destino oculto pero no como director, sino como creador de la historia y productor ejecutivo. Sin embargo, la producción cinematográfica no tuvo el mismo recibimiento que las primeras dos entradas de la saga, ni el mismo alcance en taquilla. La sexta película tuvo, además de Schwarzenegger y Linda Hamilton, a Mackenzie Davis, Gabriel Luna y Diego Boneta entre su reparto. Si aún no la has visto, la encuentras disponible en el catálogo de la plataforma Star Plus.

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