Super Mario Bros: La película ha hecho historia en la animación como la mayor adaptación cinematográfica de videojuegos en la historia desplazando a Sonic 2. Además, el filme coproducido por Illumination y Nintendo ha roto otros cinco récords, incluyendo la mejor apertura en lo que va del año, superando a Ant-Man and The Wasp: Quantumania. Esto no ha evitado que surjan las críticas a su alrededor, incluyendo la de John Leguizamo, quien interpretó a Luigi en el live-action de 1993.
La película originalmente se encontró con la decepción y las bajas expectativas de los fanáticos debido a la elección de Chris Pratt como la voz de Mario y al darse cuenta de que el amado personaje del videojuego no tendría su icónico acento italiano. Sin embargo, la película ha desafiado las expectativas, incluso con malos comentarios de los críticos especializados, y tiene una puntuación de audiencia del 96% en Rotten Tomatoes.
Universal Pictures
Super Mario Bros, que continúa en las salas de Cinépolis y Cinemex, también está siendo elogiada por cierto grupo de personas, pero por una razón completamente diferente, afirmando que la película es tan exitosa porque es "anti-woke". Caso contrario al que se enfrenta The Walt Disney Company, que ha recibido una reacción violenta debido a la mayor inclusión en sus nuevos proyectos (la nueva versión de La sirenita con Halle Bailey, por ejemplo).
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Sin embargo, irónicamente, la película incluye una escena que se consideraría controvertida y "woke", especialmente dado el clima actual con la comunidad queer y varias leyes que atentan contra los derechos humanos de las personas transgénero. En una escena se ve a Kamek, que es la mano derecha de Bowser, vistiendo ropa de mujer. Está esencialmente disfrazado de la princesa Peach (voz de Anya Taylor-Joy), con un vestido completo, peluca y maquillaje.
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Las películas han mostrado personajes travestidos durante décadas, incluyendo la cinta infantil Lilo y Stitch. La mayoría de las veces, la audiencia prevista para la película es demasiado joven para comprender el contexto general o las implicaciones de esas escenas, y simplemente encuentran que es un momento divertido. No es necesariamente incluyente colocar escenas como esta, pero ciertamente tampoco es "anti-woke" como muchos han querido señalar.
