Esta noche llegó el penúltimo episodio de Succession, la aclamada serie de HBO creada por Jesse Armstrong. Después de tres temporadas y nueve capítulos, solo una entrega dominical nos separa de conocer los destinos de Kendall (Jeremy Strong), Siobhan (Sarah Snook) y Roman Roy (Kieran Culkin). Han pasado bastante cosas desde la muerte del patriarca de la familia en el episodio 3, y justo hoy vimos el esperado funeral que reunió a decenas de personalidades del mundo político y empresarial en la ciudad de Nueva York.
La semana pasada nos tocó ser testigos de la alocada y agitada jornada electoral en Estados Unidos. Como era de esperarse, los empresarios son quienes lideran al mundo y gracias al trato de Roman, fue el candidato republicano Jeryd Mencken, quien es descrito prácticamente como un neonazi, el que fue elegido como el nuevo presidente de la nación gracias a la narrativa creada por ATN, la cadena de noticias de Waystar Royco que tiene Tom Wambsgans (Matthew Macfadyen) a su mando.
Ahora sí, hablemos de lo que sucedió durante esta velada, pero antes, ¡esta es una ALERTA DE SPOILERS! Así que si todavía no han tenido oportunidad de ver el episodio 9, corran a verlo y después regresen a leer esta nota. El temido funeral de Logan Roy (Brian Cox) llegó y trajo un frenesí de emociones entre sus cuatro hijos y el país entero, aunque no por las mismas razones.
Han pasado relativamente poco tiempo desde que Logan murió, pero desde entonces han sucedido un sinfín de cosas. El problema principal entre los herederos Roy es impedir (o no) el trato de venta de Waystar Woyco a GoJo, la empresa de Lukas Matsson (Alexander Skarsgard), provocando que los hermanos se dividieran en dos bandos, siempre en busca del liderazgo que quedó vacío. Todo indicaba que la alianza que Shiv forjó con el sueco la pondría en una posición ventajosa, pero luego de ser descubierta por Kendall, volvió a quedar vulnerable aunque quizás Mencken cambie su futuro para bien.
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No queda ninguna duda de que la ausencia de su padre fue un golpe fuerte para sus hijos, sobre todo para Roman. A pesar de que él se propuso para dar el discurso en el funeral y después de que su tío le arrebatara el lugar en el podio, compartiendo la terrible persona que era Logan, el más pequeño de los Roy entró en pánico e hizo el ridículo frente a los asistentes y las cámaras, volviéndose viral en internet por la manera en la que lloró en el altar y convirtiéndose en el hazmerreír del mundo entero.
Mencken (Justin Kirk) fue uno de los invitados a la ceremonia religiosa y después de ver a Roman quebrarse emocionalmente, cambió su estrategia y rompió el trato que tenía con él al verlo tan débil. Pero algo trascendental también ocurrió durante el evento, pues Kendall se enteró de cuál era el as bajo la manga de Shiv para convencer al presidente electo de concretar la venta con Matsson.
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Si bien Ken trató de volver a hablar sobre su alianza, fue Siobhan la Roy que robó su atención para convencerlo de que GoJo son la verdadera esperanza para su presidencia, poniendo como incentivo el tener a un CEO estadounidense, en vez de seguir con el mandato sueco. Más allá de las lágrimas derramadas, la voz entrecortada y el soporte entre hermanos a lo largo del funeral, los hijos de Logan siguen peleando por el puesto de sucesor en la compañía que fundó desde cero, sin importar si eso significa traicionar al de al lado.
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Aunque Roman se mostró como un candidato bastante fuerte y audaz en esta nueva etapa como Co-CEO de la empresa, su padre lo sigue atormentando desde la muerte y hoy fue la prueba más grande de ello, pues su nexo con la política se desvaneció rápidamente, dándole la oportunidad a Shiv de liderar la inmensa lucha por dirigir el timón de Waystar Royco contra Kendall. Si prestamos atención al intro de la serie, es ella quien parece quedar atrás de sus hermanos, pero ¿será esta la prueba de que ella será quien resiste y la próxima sucesora? El décimo y último episodio de Succession se estrena el domingo 28 de mayo a las 7:00 PM por HBO Max.