Durante el Super Bowl LIX, celebrado en Nueva Orleans, Taylor Swift asistió al partido para apoyar a su novio, Travis Kelce -ala cerrada de los Kansas City Chiefs- quienes se enfrentaron a las Águilas de Filadelfia. Sin embargo, al ser mostrada en las pantallas del estadio, Swift se mostró con un ánimo menos efusivo que el del año anterior cuando el equipo de Kelce se hizo con la victoria.
Además, este año los seguidores de la pareja también esperaban la entrega de un posible anillo de compromiso entre Swift y Kelce que tampoco tuvo lugar en el Súper Tazón.
Entre otros episodios incómodos para Swift, hay que señalar que la cantante fue abucheada por los asistentes del estadio, quienes en repetidas ocasiones han criticado que ella esté presente en el Super Bowl, ya que su visita genera otro tipo de enfoque al partido que no es del todo bien visto en el mundo deportivo.
Por otra parte, dada la llegada de Donald Trump al estadio, quien en el pasado fue primero apoyado y luego criticado por la cantante, muchos fans en redes sociales especularon que el comportamiento de Swift estuvo ligado al mal desempeño del equipo de Kelce a lo largo del partido, a la participación del presidente de los Estados Unidos en él, y a la posible reacción de su novio ante las preguntas en entrevistas anteriores donde le cuestionaron sobre su relación y posible pedida de mano, que el jugador desvió con incomodidad.
Aunque según informes, y seguidores de ambos artistsa Kelce estaría considerado diseñar un anillo de compromiso especial para Swift, este no tiene fecha de entrega para la artista. Además hay que destacar que en los Critics Choice Awards, Taylor portó una diminuta T en su vestuario que estuvo ligada a su pareja.
Si embargo, y pese de la derrota de los Chiefs y la reacción negativa del público, Swift y Kelce continúan siendo una de las parejas más comentadas del momento, con seguidores atentos a cada desarrollo en su romance.
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Aunque el anillo de Super Bowl no llegó para Kelce ni el de compromiso para Swift, la relación entre ambos sigue siendo una de las más mediáticas del momento, y así a los seguidores de estas estrellas solo les quedará ver si el resto del 2025 traerá mejores noticias para ambos o no... Bad luck, Swift.
