Cuando se mencionan a los actores más sobresalientes del cine, frecuentemente se nombran a estrellas como Robert De Niro, Tom Cruise, Anthony Hopkins y James Stewart, quienes sobresalieron principalmente en el siglo XX, con excepción de la estrella de Top Gun: Maverick. Algunos de ellos comenzaron sus carreras con directores como Martin Scorsese y Francis Ford Coppola, pero mientras que unos aún continúan mostrando su talento en la pantalla grande, hay otras leyendas del séptimo arte cuyas filmografías no llegan ni a los 10 títulos.
Mientras que cineastas como Quentin Tarantino presumen que solo harán 10 películas en toda su carrera, hay intérpretes que no pudieron filmar más cintas al morir de manera repentina o por alguna enfermedad. Tal fue el caso de John Cazale, quien formó parte de solo un cortometraje, un episodio en una serie de televisión y cinco largometrajes, pero que fueron suficientes para dejar un legado ampliamente reconocido en el cine.
El actor debutó en el teatro y la pantalla grande en 1962 luego de formar parte de la obra J.B. y el corto The American Way, pero después de una única aparición en la televisión con N.Y.P.D., Cazale consiguió su gran oportunidad en el cine al ser elegido como Fredo Corleone en El Padrino, la adaptación de la novela de Mario Puzo por Coppola. La cinta recibió 11 nominaciones al Oscar y tres estatuillas, aunque su suerte en aparecer en producciones aclamadas se replicó dos años más tarde.
Colaborando nuevamente con el cineasta ítalo-estadounidense, John Cazale compartió créditos con Gene Hackman en La conversación, cinta que ganó la Palma de oro en Cannes y consiguió tres candidaturas a los Oscar. En 1974, el mismo año, retomó su papel de Fredo en El Padrino: Parte II, considerada por muchos como la mejor de la trilogía, y obtuvo 11 nominaciones, de las cuales ganaron seis estatuillas, incluidas Mejor película.
Paramount Pictures
Un año después, Cazale volvió a compartir escena con Al Pacino en la producción de Sidney Lumet titulada Tarde de perros, donde de las seis nominaciones al Oscar, ganó el galardón a Mejor guion original. Por su parte, recibió una mención en los Globos de oro como Mejor actor de reparto, pero uno de los trabajos más importantes de su carrera llegó en 1978 con el estreno de El francotirador, largometraje en el que interpretó a Stan Stosh y que además fue el último.
Globe Photos
The Deer Hunter, como se le conoce originalmente a la película de Michael Cimino, recibió nueve nominaciones de La Academia y ganó cinco de los premios. Lamentablemente, para el rodaje de la cinta él ya se encontraba muy enfermo por cáncer del pulmón, pero luego de ser convencido por Meryl Streep de aparecer en ella, quien además fue su pareja, Robert De Niro pagó su seguro y convenció al director de filmar todas las escenas de Cazale primero que el resto del largometraje. Ese mismo año, a los 42 años de edad, falleció en la Ciudad de Nueva York.