Este 11 de octubre de 2025, la industria del cine y el entretenimiento tuvo que despedir a una de sus actrices más icónicas y asombrosas luego de darse a conocer la muerte de la aclamada Diane Keaton. La ganadora del Oscar falleció a los 79 años de edad en California, según lo confirmaron diversos medios estadounidenses quienes también se encargaron de difundir esta triste noticia. Y es que gracias a su talento, Keaton pasó a la fama con un estilo único y un carisma particular, que le auguró más de cinco décadas de éxito en el séptimo arte.
Nació el 5 de enero de 1946 en Los Ángeles, bajo el nombre real de Diane Hall y comenzó su carrera en los escenarios de Broadway antes de dar el salto al cine en la década de 1970. Su victoria en las artes escenográficas se gestó cuando interpretó a Kay Adams en El Padrino bajo la dirección de Francis Ford Coppola, y desde entonces pasó a ser uno de los rostros más reconocidos de Hollywood.
Diane Keaton; la fama con Woody Allen y su legado
United Artists
Sin embargo, alcanzó la fama internacional gracias a Annie Hall de Woody Allen, donde fue reconocida por su versatilidad al interpretar a un personaje excéntrico, encantador, emocional y profundamente humano. Ese papel la llevó a ganar un Oscar a Mejor actriz y también la consolidó como una de las actrices más populares del cine contemporáneo y la moda.
Además participó en más de 60 películas, destacando en títulos como Manhattan, Reds, Baby Boom, El Padre de la Novia, Alguien tiene que ceder y El club de las primeras esposas, demostrando que su gran versatilidad le permitió moverse con soltura entre la comedia romántica, el drama y el cine independiente sin perder su presencia inusual y magnética.
Diane Keaton más allá de la actuación
Universal Pictures
Por otra parte, la actriz también fue directora, productora y fotógrafa, por lo que se convirtió en una de las figuras más influyentes del cine estadounidense y las artes visuales, en gran medida por su manera de vivir la fama con sencillez y mantener su vida privada lejos de los reflectores. Aunque nunca se casó, sí fue madre adoptiva de dos hijos, a quienes dedicó gran parte de su vida fuera de la farándula.
Tras su muerte, Hollywood pierde uno de sus mayores talentos, y a una actriz que transformó la forma en que se representaba las mujeres en el cine.