El tremendo éxito en taquilla, con la crítica y con el público de Joker, pusieron a pensar a Warner Bros. en una potencial secuela, de la cual se ha estado rumoreando por varias semanas, sin embargo, es hasta ahora que lo han hecho oficial. De acuerdo con información de The Hollywood Reporter, la continuación de la historia de Arthur Fleck (Joaquin Phoenix) ya está aprobada, lo que aún está en pláticas es el regreso tanto de Joaquin Phoenix al protagónico como de Todd Phillips (¿Qué pasó ayer?) a la dirección.
Lo interesante de esta situación es que Todd Phillips quiere seguir indagando en los orígenes de varios personajes de DC y le propuso a los ejecutivos de Warner que le permitieran crear más historias de origen con otros superhéroes y villanos de los cómics, sin embargo, esto no ha sido aprobado, aunque rumores aseguran que sí le darán a otro personaje para que desarrolle una historia similar a la de Joker.
De momento no hay fecha tentativa de estreno para Joker 2, pero se espera que también el guionista Scott Silver (quien coescribió la primera entrega) vuelva para repetir su trabajo, mientras que del resto de participantes en la película no se menciona nada de momento. De confirmarse el regreso de Phoenix sería la primera vez que protagonice una secuela y, aunque ha expresado que su motivación no es el dinero sino una buena historia, será interesante conocer qué le proponen para que se anime a retomar su rol.
El reporte también indica que Phillips ganará aproximadamente US$100 millones (M) por haber dirigido Joker, ya que parte de su acuerdo era renunciar a su salario inicial, esperar al despeño de la cinta en taquilla y aspirar a quedarse con más ingresos, cosa que le salió a la perfección, ya que con los más de US$1,000 M que ha generado la cinta en taquilla y su presupuesto de producción que rondó los US$55 M, las utilidades son amplias.
Así que veremos más de Arthur Fleck y quizá ahora sí Warner Bros. se anime a lanzar su sello DC Dark para contar más historias de origen de sus personajes, pero de una forma más oscura, utilizando menos efectos especiales y dándole prioridad al drama y vivencias que padecen tanto villanos como superhéroes de los cómics.