Si hay un actor tan querido como admirado en la industria ese es sin duda Keanu Reeves, quien nos ha dado las interpretaciones de Neo en Matrix, John Wick e incluso ha sido la voz de Johnny Silverhand en el videojuego que inspiró la serie de Cyberpunk. Y aunado a su actuación, escuchar hablar a Reeves sobre su pasión por las motos resulta igual de cautivador.
Hace casi cuatro décadas, el actor de Bill y Ted salvando el universo montó una motocicleta por primera vez, según él mismo cuenta para la revista GQ, y desde entonces esto se convirtió en uno de los grandes impulsos de su vida:
Aprendí a montar en moto mientras rodaba una película en Munich. Había una mujer joven que tenía una Enduro y le pregunté si me enseñaría a montarla. Y cuando volví a Los Ángeles, en el 86 u 87, me compré mi primera moto
Tanto aprecio ha cultivado por ambas corrientes que, casi como un sueño, logró combinarlas en su actividad profesional fundando en 2011 una empresa dedicada a la realización de estos vehículos ¡completamente personalizados!
Al lado de Gard Hollinger, el intérprete de Matrix: Resurrecciones fundó Arch Motorcycle, una industria empeñada en crear motocicletas hechas a mano, personalizadas y completamente hechas a la medida, que sería en el sueño para cualquier motero (aunque ya imaginarás el precio final de la cuenta). La fundación de esta empresa le ha permitido a Reeves convertirse en el custodio de un garage repleto de impresionantes modelos que se suman a su propia colección que procura como verdaderas reliquias.
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La fuente del amor y el riesgo para su salud
Durante la entrevista para la Revista GQ, Reeves abrió las puertas de su garage al tiempo que expresaba su amor incondicional por estos vehículos:
Es su cualidad visceral, la vibración, el viento, el sonido. Es realmente un gran lugar para pensar, sentir, escapar. Cuando no monto en motocicleta, tengo abstinencia. No es bueno para mi salud
Y en efecto, más allá del síndrome de abstinencia que persigue al actor de Equipo a la fuerza cuando está lejos de sus amados medios de transporte, el hecho de amar tanto la velocidad ya le ha ocasionado un par de problemas de gravedad en el pasado. A los 24 años de edad Keanu Reeves sufrió un accidente en California y, lo que él mismo denominó como "un paseo del diablo", lo dejó hospitalizado durante días con varias costillas rotas y más lesiones.
En aquel entonces, tuvieron que remover su bazo debido al accidente y en su lugar Reeves obtuvo una gran cicatriz que se extiende a lo largo de su abdomen. Aun así, actualmente el intrépido actor sostiene que su obsesión por las motos es tal, que en alguno que otro momento se saltó las reglas de sus contratos. "En el pasado hubo contratos que decían que no podía montar en moto, eres un activo y no quieren que te estrelles. Así que yo a veces prestaba atención a aquello y otras no… Ups" admitió divertido para la revista.
Pinterest / Just Jared
En su gran colección, tanto de motocicletas como recuerdos, Keanu Reeves conserva la segunda moto que se compró, una Mark 2A Norton Commando de 1973. De hecho, para el rodaje de Mi Idaho Privado en 1991 el actor apareció en pantalla con su estimado vehículo pues su personaje debía conducir exactamente el mismo modelo.
También recuerda con cariño que, en cintas como Reacción en cadena, John Wick 3: Parabellum y hasta en Matrix Recargado -de forma indirecta-, pudo disfrutar de sus dos pasiones en una misma fusión. ¿Sabías este dato sobre el actor canadiense? Y más allá de ello, ¿compartes su amor ya sea por la actuación o por los vehículos motorizados?
