Will Smith ha hecho prácticamente de todo en la gran pantalla. Lo hemos visto pelear contra extraterrestres con mucho estilo en Hombres de negro, liderar la resistencia humana en Día de la Independencia, enfrentar el apocalipsis con un perro en Soy leyenda, e incluso convertirse en el carismático Genio azul en Aladdin de Disney. Si alguien puede saltar entre géneros como si nada, es el protagonista de El príncipe de Bel-Air.
Además de ser un héroe de acción, un ser cósmico y un sobreviviente del fin del mundo, Will también nos dio una lección inolvidable sobre algo muy humano: el arte de ligar. Antes de que existieran los tutoriales en TikTok o los gurús del amor de redes sociales, Will Smith ya había enseñar cómo conquistar con carisma, confianza y unos cuantos trucos sencillos pero eficientes. Todo esto pasó hace 20 años en una comedia romántica que fue un éxito rotundo y que ahora puedes ver en Netflix.
Hablamos de Hitch: Especialista en seducción, una película que mezcla risas, romance y un poquito de vergüenza ajena. Estrenada en 2005, esta cinta se convirtió en una de las comedias románticas más queridas de la década, gracias a su fórmula ganadora: Will Smith, una historia entrañable y situaciones exageradas que se sienten demasiado reales para cualquiera que haya intentado ligar sin hacer el ridículo.
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En Hitch, Will interpreta a Alex Hitchens, mejor conocido como "Hitch", un asesor profesional en citas que ayuda a hombres comunes y corrientes a conquistar al amor de sus vidas. Sin trucos baratos ni engaños, Hitch cree firmemente que todos tienen algo especial que ofrecer, solo necesitan una pequeña ayuda para mostrarlo. Con frases sabias, estrategias inteligentes y mucha empatía, Hitch transforma a cualquiera en en versiones más seguras de sí mismos.
Pero como toda buena historia, el verdadero reto aparece cuando el maestro tiene que poner en práctica sus propias lecciones. Ahí donde entra Sara Melas, interpretada por Eva Mendes, una periodista que no cae tan fácilmente en los encantos de Hitch. Lo que sigue es una batalla entre el amor y el orgullo, con momentos cómicos, malentendidos y un final que te saca una sonrisa.
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Lo curioso es que con los años, Hitch fue quedando olvidada entre tantas comedias modernas, remakes, secuelas innecesarias y series de plataformas, pero la realidad es que su encanto sigue intacto. Es de esas películas que puedes ver en una tarde cualquiera, y terminar con una sonrisa en la cara y ganas de salir a conquistar el mundo. Y ahora que está disponible en Netflix, Hitch merece ser parte de un buen maratón lleno de diversión.