Cuando se habla de actores que han marcado la historia del cine, es imposible no pensar en figuras como Matt Damon, Jack Nicholson y Leonardo DiCaprio. Cada uno tiene su propio legado, sus personajes inolvidables y sus momentos gloriosos en la alfombra roja. Damon nos dio al súper espía Jason Bourne y nos rompió el corazón en Mente indomable. Nicholson nos dio miedo en El resplandor y luego nos hizo reír en Alguien tiene que ceder. Y qué decir de Leonardo, cuya carrera va desde Titanic hasta El lobo de Wall Street, pasando por todos los géneros hasta finalmente ganar su merecido Oscar.
Pero lo que muchos no saben, o simplemente olvidaron, es que hay una película en la que estos tres titanes de Hollywood estuvieron presentes, todos en la misma producción. Si bien suena al sueño que podría tener un cinéfilo, la realidad es que sí sucedió. Y no sólo eso, sino que fue una película intensa, galardonada, y dirigida por uno de los cineastas más respetados del mundo: un thriller policiaco repleto de tensión, giros inesperados, y un final que dejó a más de uno con la boca abierta.
Se trata nada más y nada menos que Los infiltrados, esa misma película que arrasó en los premios Oscar, con Martin Scorsese al mando, y que te tuvo al filo del asiento durante sus dos horas y media. Y si estás pensando cómo demonios es que no la recuerdas, no eres el único Por algún motivo, esta joya del cine criminal no está tan presente en las mentes de los cinéfilos como debería, a pesar de su nivel de producción, narrativa y emoción.
The Hollywood Reporter
Todo comienza en el sur de Boston, donde la fuerza policial estatal está librando una guerra contra el crimen organizado irlandés-estadounidense. El joven policía encubierto, Billy Costigan, está asignado a infiltrarse en la mafia dirigida por Frank Costello. Mientras Billy gana rápidamente su confianza, Colin Sullivan, un joven criminal que se ha infiltrado en la policía estatal como informador de Costello, se está posicionando en el poder en la Unidad de Investigación Especial.
Tanto Sullivan como Costigan se ven cada vez más consumidos por su doble vida, pero cuando queda claro para la mafia y la policía que hay un infiltrado entre ellos, ambos están repentinamente en peligro de ser atrapados y expuestos al enemigo. Es entonces cuando empieza una carrera para descubrir la identidad del otro antes de ser expuestos.
ScreenRant
Lo increíble de esta película es cómo estos tres actores, cada uno con un estilo totalmente diferente, se complementan a la perfección. Pero más allá de este trío, el reparto de Los infiltrados parece ser un desfile de talento, con Mark Wahlberg, Martin Sheen, y Vera Farmiga, todos brillando con una banda sonora que pone los pelos de punta.
A pesar de eso, Los infiltrados es una de esas películas que, por alguna razón, no todos tienen fresca en la memoria. Tal vez porque han pasado casi 20 años desde su estreno, o porque quizá, Scorsese ha hecho tantas obras maestras que esta queda escondida entre Casino, Buenos muchachos y El irlandés. Pero lo cierto es Los infiltrados debería estar mucho más arriba en cualquier lista de "películas que tienes que volver a ver sí o sí".