Hay muchas escenas memorables en Un final feliz de Michael Haneke, pero hay una que particularmente se queda en la mente. Se ve a un joven parado en el pequeño escenario de un bar de karaoke mal iluminado, silencioso e inconsciente, bailando hasta alcanzar un estado de éxtasis. No olvidamos este momento sorprendente, incluso mucho después de que termina la película, no porque nunca hubiéramos esperado escuchar el éxito mundial de Sia, "Chandelier", en una película de Haneke. Más bien, esto se debe principalmente a Franz Rogowski, cuya presencia física es tan atrayente que uno no puede apartar la vista de él.
Les Films du Losange
Originario del suroeste de Alemania, de padre médico y madre partera, con estudios en teatro y danza, el actor alemán Rogowski (recientemente involucrado en Freaks Out, de Gabriele Mainetti) se ha consolidado, debido a su intensidad física y vehemencia emocional, como una deslumbrante presencia en la pantalla grande. Por su formación, el actor europeo evidencia una comprensión plena de los espacios teatrales y cinematográficos. Prefiere los espacios íntimos y el apoyo de la cámara para capturar sus micromímicas, trabaja detalladamente la corporalidad y despliegue físico de sus personajes haciendo que sus movimientos impredecibles, su predilección por los silencios y la calidez de su rostro y gestos faciales alcancen una armonía conmovedora.
Rogowski irradia calma y amabilidad en las interpretaciones sensibles, comprometidas y fundamentadas en personas que siempre parecen estar ocultando algo, una confusión interna o una vulnerabilidad herida, ya sean sus torpes modales y desparpajo irresistible en Love Steaks (2013), su actitud reservada, noble y amorosa en In the Aisles (2018) o sus silencios perturbadores, enigmáticos y amenazantes en Luzifer (2021), el actor logra transmitir un amplio espectro de autenticidad, tensión y curiosidad. Sus ojos compasivos, una memorable cicatriz en el labio hendido, una fluidez controlada en sus desplazamientos son algunas cualidades que lo convierten en una presencia seductora en pantalla. Su enfoque es fundamentalmente profesional, poniendo en primer lugar el trabajo con el director y sus colegas por encima del lucimiento individual, siendo consciente de cómo las interacciones con los otros moldean las emociones de sus personajes.
Daredo / Soulfood
Love Steaks (Dir. Jakob Lass, 2013)
En su segundo largometraje como director, Jakob Lass decidió combinar la improvisación en varias escenas con una narrativa general planificada introduciendo a sus dos protagonistas (los actores profesionales Lana Cooper y Rogowski) en un entorno hotelero real, con el personal real del establecimiento en todos los roles secundarios. Esta combinación de planificación y espontaneidad infunde a todo el filme una energía notable que sugiere que cualquier cosa podría suceder y garantiza que la propuesta no se descarrile. Uno de los pilares de este universo es el delgado y torpe Clemens, un hombre tímido y sin hogar cuando llega al complejo de lujo donde comenzará su aprendizaje y donde se le permite dormir en un colchón en el cuarto de lavado. Además de aprender sobre técnicas de masaje y energías corporales, se le asigna la tarea de mantener limpia el área de bienestar, lo que brinda a la película algunos de sus momentos más estruendosos de humor físico, por ejemplo, cuando Clemens se resbala repetidamente en los pisos mojados que él mismo está lavando.
Sommerhaus Filmproduktion
En los pasillos (Dir. Thomas Stuber, 2018)
La timidez y la soledad son dos constantes a las que recurre Rogowski para encarnar a Christian, un hombre que después de atravesar una crisis laboral comienza a trabajar en los almacenes y bodegas de un supermercado. Con la paciencia necesaria aprende rápidamente a empujar paletas motorizadas y utilizar el montacargas en los pasillos, bajando cajas de comida y otras cosas de estantes tan altos como edificios: un trabajo difícil y potencialmente peligroso. Tranquilo y vigilante en su horario nocturno, pronto se siente atraído por el enigmático encanto de Marion (Sandra Hüller). La máquina de café se convierte en su punto de encuentro habitual y los dos empiezan a conocerse. Pero Marion está casada y los sentimientos de Christian por ella parecen no ser correspondidos, especialmente cuando ella no se presenta al trabajo, incrementando la angustia en el tímido hombre que además lucha para no revelar sus acciones del pasado.
Schramm Film
En tránsito (Dir. Christian Petzold, 2018)
En esta adaptación de la novela de la autora antifascista Anna Seghers sobre un alemán en París que ha escapado de un campo de concentración y huye a Marsella en el momento de la invasión nazi, Rogowski interpreta al fugitivo Georg, un hombre al que le han encomendado entregar una carta a un famoso autor simpatizante de la resistencia antinazi, pero al descubrir que este hombre está muerto, le roba los documentos de identidad del escritor y dos visas para él y su exesposa que les permitiría un salvoconducto en el extranjero. Una vez en Marsella, se hace pasar por este escritor, sumergiéndose en una crisis de identidad, moral, romántica y política. En tránsito, de Christian Petzold, es casi obligatoria en la filmografía del teutón.
Ulrich Seidl Filmproduktion
Luzifer (Dir. Peter Brunner, 2021)
Rogowski interpreta a Johannes, un joven que vive en un estado de precaria codependencia con su madre, una adicta en recuperación (interpretada por la artista Susanne Jensen) que hace tiempo que se entregó solemnemente al Dios todopoderoso. Aislados de la sociedad en un lugar remoto de los Alpes austríacos, con las cabezas afeitadas, en compañía de la naturaleza y las arduas jornadas de trabajo en el campo, madre e hijo están dispuestos a configurar un nuevo Edén.
No obstante, una enorme corporación de esquí está dispuesta a adueñarse de la zona y sacar provecho a los recursos del lugar. La película de Brunner postula que Johannes ha estado allí la mayor parte de su vida y, por lo tanto, está atrapado en un estado infantil atrofiado: socialmente inepto y vagamente analfabeto. Pasa sus días trabajando, orando a Dios y entrenando a un águila de alas impresionantes, llamada Arthur. También cree que las fuerzas oscuras acechan en la grieta de una montaña distante y que los proyectos de la corporación recién llegada son manifestaciones del mismo diablo.
Freibeuterfilm Rohfilm
La gran libertad (Dir. Sebastian Meise, 2021)
Esta película, La gran libertad, de Sebastián Meise, ambientada en la Alemania de la posguerra exige a Rogowski sufrir una transformación más física por primera vez en su carrera, incluyendo la pérdida de peso para cumplir con el desafío de interpretar al personaje de Hans, un hombre homosexual oprimido por el gobierno y la violencia estructural de la sociedad, en una evolución física que contemplamos en varias estancias de prisión desde 1945 hasta 1968. Rogowski nos ofrece una brillante manifestación corporal de la opresión y el trauma a los que es sometido su personaje. Su eficacia como actor se ve a menudo en la suavidad de su expresión, un corazón herido que emerge detrás de una fachada cálida, pero es evidente tanto en la forma en que camina como en la forma en que apoya las manos.
