Después de que el Dios del engaño logra escapar de Los Vengadores con el tesseract en sus manos, decide que es tiempo de regresar a Midgard. Utilizando el poder de la gema, Loki comienza a saltar a través del tiempo donde termina visitando momentos clave de la historia humana. Intentando sacar ventaja para sus propios fines o simplemente por diversión, el asgardiano termina interfiriendo en estos eventos, lo que provocará que las líneas del tiempo comiencen a sufrir estragos. Sin embargo, pronto se encuentra con la Autoridad de la Variación Temporal (AVT), una organización burocrática que existe fuera del tiempo y el
espacio, que lo obligará a pagar por sus crímenes. Al darse cuenta que sus poderes como semi-dios no funcionan contra la organización, Loki se rinde y decide ayudar al Agente Mobius para derrotar a un nuevo enemigo que está alterando el tiempo.




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