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Guillermo del Toro conmueve con una historia nunca antes vista
por Equipo SensacineMxEn el marco del 20 aniversario del Festival Internacional de Cine de Morelia, los estrenos nacionales como Huesera y Zapatos Rojos fueron más cotizados que nunca, sin embargo las películas internacionales como Los Fabelmans y Triangle of Sadness hicieron que los cinéfilos se formaran desde temprano para intentar conseguir un boleto.
Eso dicho, fueron dos de los tres compadres los que lograron traer a gente de todos lados de la república. Iñárritu con su BARDO, Falsa crónica de unas cuantas verdades y Guillermo del Toro con Pinocho. Este último, abarrotando la única función que se ofreció en el festival. Segunda parada que tendría después de su estreno en el festival de cine de Londres hace algunas semanas.
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Guillermo del Toro ha estado teseando a todos sus admiradores desde 2008 con la realización de esta película. Tuvieron que pasar 14 años y muchos intentos fallidos para que Pinocho por fin viera la luz. ¿El director de El espinazo del diablo lo hizo de nuevo? Queridos amigos, es de mi agrado confirmarles que sí.
El cineasta tapatío ha coescrito y codirigido una versión del títere de mader que nunca antes habíamos visto. No solo por el estilo de animación o historia, Pinocho profundiza mucho más sobre el significado de la pérdida, el dolor y qué significa realmente ser "un niño de verdad". Esto último desde el punto de vista de su verdadero protagonista, que al contrario de lo que diga el póster y el título, es Geppetto. La película logra contar, sin miedo, las consecuencias del crecimiento fascista en la Italia de Mussolini. Donde el propio Del Toro afirma:
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Es la Italia pre-fascista y todos se comportan como marionetas, excepto la marioneta.
El director de Titanes del pacífico muestra escenas a las que no estamos acostumbrados con películas de esta naturaleza. Desde Geppetto alcoholizado, hasta un Pinocho utilizando un rifle. Esta tiene que ser una de las cosas más importantes a destacar de esta reseña: la película, si es que eres un padre preocupado por blindar a tu hijo de la crueldad humana, no es para niños. Sin embargo, toma el consejo del propio creador de El Gabinete de curiosidades de Netflix:
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Si blindas a tus hijos de la oscuridad, les va a pegar diez veces más fuerte y dirán: Entonces, ¿me has estado mintiendo?
Esta oscuridad está completamente bien lograda con el diseño de producción característico de Guillermo del Toro, con colores neones cuando la historia lo requiere pero completamente ausentes de color cuando la película deja de ser un cuento de hadas. A esto sumémosle la bellísima música de Alexander Desplat, en su segunda colaboración con el mexicano desde La forma del agua. La música se vuelve vital para la historia pues esta, mis queridos amigos, es un musical. Tal vez no esté bien mencionado en la publicidad de la película así que no se espanten al ver como Pinocho empieza a cantar en los primeros minutos de la cinta del director de El Laberinto del fauno. Eso dicho, no se preocupen, tampoco van a ver La La Land: Una historia de amor.
Hay que destacar que el trabajo actoral es maravilloso, pues la película cuenta con talentos como Ewan McGregor, Cate Blanchett, Tilda Swinton, Ron Perlman y Finn Wolfhard. Sin embargo, la película se la lleva completamente David Bradley (Harry Potter y la piedra filosofal) quien interpreta a un Geppetto dolido, alcohólico, rudo pero al mismo tiempo completamente dulce y amoroso.
Aunque acabes de leer los últimos párrafos y te pongas a pensar que vas a ver una película completamente cargada de política y sufrimiento, tranquilo, no es así. Pues el guion, escrito por Guillermo y Patrick McHale (Hora de Aventura) salta de la tragedia a la comedia en cuestión de segundos; así que ten por seguro que su duración de casi dos horas, no se sentirá tanto.
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Tal vez extrañes la vieja historia de aquel Pinocho de 1940 con todas esas lecciones que a ti te enseñó de pequeño. Esto, a mi parecer, sigue en la película pero no de la manera que crees. Pues estas lecciones realmente las tendrá que vivir Geppetto. Pinocho funciona como un barco que transporta el verdadero mensaje de la película: El tiempo. ¿Por qué esperar a tener algo en las manos para saber qué es real cuando tu corazón indica que ese algo ya lo es? ¿Vale la pena permitir que nuestras pérdidas nos eviten aprovechar del tiempo que tenemos en este mundo? O, tal vez, nuestras pérdidas y emociones son aquellas cosas que nos hacen ser reales.
El productor de El libro de la vida ha logrado hacer una película de la mano de animadores mexicanos que, sin duda alguna, cabe dentro de las mejores películas del año y que definitivamente estará presente en la próxima temporada de premios. Pinocho de Guillermo del Toro estrena en algunos cines en noviembre y en todo el mundo el 9 de diciembre por la plataforma de Netflix.
