Ahora que Avatar: El camino al agua se encuentra en cines de todo el mundo, la relación de amistad entre James Cameron y Guillermo del Toro ha sido un tema regular las últimas semanas, especialmente por el apoyo incansable del director de Terminator hacia el tapatío. Aunque pocas cosas se comparan a la vez que Cameron por poco golpea a un abusador que le hizo la vida de cuadritos al cineasta tapatío.
Todo sucedió durante la mágica noche en la que Titanic se alzó con 11 premios Oscar. Aunque parecía un momento desbordante de felicidad, todo cambió cuando el famoso empresario y productor, Harvey Weinstein, quien enfrenta nuevas acusaciones de abuso sexual, se acercó a James Cameron y, con pocas palabras, comenzaron una álgida discusión que por poco termina en una golpiza, así lo recordó en entrevista con Vanity Fair.
(Especial)
Recuerdo que casi me peleo con Harvey Weinstein y le golpeo con mi Oscar.
"Sucedió en la planta principal del teatro. Había empezado a sonar la música para volver a nuestros asientos. La gente a nuestro alrededor decía: '¡Aquí no! Aquí no. Como si estuviera bien pelearse en el aparcamiento, ya sabes, pero no estaba bien allí cuando sonaba la música y estaban a punto de entrar en vivo", mencionó el también director de Mentiras verdaderas.
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Aunque no quiso revelar minuciosos detalles respecto al detonante de esta situación, James Cameron aseguró que se trata de una “larga historia” relacionada con “Guillermo del Toro y lo mal que le trató Miramax con Mimic", recordó Cameron. "Harvey se me acercó y me habló de lo buenos que eran para los artistas; le dije todo lo bueno que yo pensaba que eran para el artista basándome en la experiencia de mi amigo, y eso llevó a un altercado".
Por otra parte, Guillermo del Toro, director de Pinocho y La forma del agua, compartió su mala experiencia trabajando con Harvey Weinstein, esto durante una conversación en el BFI London Film Festival en octubre de 2017. “Mi primera experiencia estadounidense fue casi la última porque fue con los Weinstein y Miramax”.
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“Tengo que decirles que sucedieron dos cosas horribles a finales de los noventa, mi padre fue secuestrado y yo trabajé con los Weinstein. Sé cuál fue peor… el secuestro tenía más sentido, sabía lo que querían”, reveló el director de El espinazo del diablo y La cumbre escarlata.
Fue así como James Cameron, aprovechando que tuvo a Harvey Weinstein frente suyo en aquellos premios Oscar, no dudó en defender a su amigo, Guillermo del Toro, y esto por poco termina en una serie de golpes. Por supuesto esto no sucedió y sólo quedó en una sorprendente anécdota.
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