Hay muchas producciones cinematográficas de acción, pero no todos los títulos logran tener la misma efectividad ni éxito que otros. Mientras que hay sagas aclamadas como Misión Imposible con Tom Cruise; hay otras que están en decadencia como el MCU; pero también están aquellas que no importa qué tan descabelladas sean, jamás perderán su fama entre las audiencias, como es el caso de Rápidos y Furiosos.
Sin embargo, hay unas que no tuvieron ni gran recibimiento entre las audiencias ni la crítica, y es peor cuando sus propios actores se avergüenzan de haber participado en ellas o simplemente jamás quisieron protagonizarlas. Hugh Grant, por ejemplo, entre bromas ha revelado que sus papeles únicamente los acepta porque tiene necesidades económicas; pero también hay actores como Adam Driver que ya han confesado que jamás quieren volver a participar en las sagas que los llevaron al estrellato cinematográfico a nivel mundial.
Otro de los intérpretes que nunca quiso aparecer en cierta película pero tuvo que hacerlo por obligación de contrato fue Channing Tatum, quien saltó a la fama por cintas como Una chica en apuros, Magic Mike y Comando especial. Aunque inició su carrera en producciones de romance, comedia y drama, en 2009 incursionó en un género distinto, aunque no fue por una intención genuina de participar en ella. Basada en las figuras de acción de Hasbro, esta saga ha sido una de las peores de este siglo.
Dirigida por Stephen Sommers, mismo realizador de la saga La momia, G.I. Joe: El origen de Cobra estrenó en 2009 y presentó la historia de Duke (Tatum) y Ripcord (Marlon Wayans), quienes se unen a la unidad militar G.I. Joe y deben utilizar tecnología de nueva generación para defender a su institución del ataque de una malvada organización. De acuerdo con Tatum, antes de involucrarse en el proyecto rechazó el papel siete veces, pero no pudo salvarse de trabajar en ella.
Paramount Pictures
“Voy a ser sincero. Odio esa película. La odio. Me obligaron a hacerla. Desde Entrenador Carter firmaron un contrato de tres películas conmigo [...] El tiempo pasa y consigues otros trabajos y estás construyendo tu carrera; tienes un trabajo que es tu sueño y quieres hacerlo, y… el estudio te llama y te dice ‘Oye, tenemos una película para ti, te la mandamos’. Te la mandan y es G.I. Joe”, declaró el actor de Kingsman: El círculo dorado durante una intervención en The Howard Stern Show.
El protagonista de La ciudad perdida confesó para Variety que solicitó que su personaje fuera eliminado en los primeros 10 minutos de la secuela, G.I. Joe: El contraataque, pues así se libraría de actuar en más entregas de la saga. Ambas películas fueron un fracaso en taquilla y la franquicia intentó moverse en una dirección distinta con el estreno de G.I. Joe: Snake Eyes en 2021 con Henry Golding y Úrsula Corberó, pero resultó un fracaso aún peor.
